Las tres operadoras de telefonía móvil están ultimando su oferta WAP en nuestro país. La primera en presentar soluciones en este sentido fue MoviStar; telefónica ha unido sus móviles con un portal de Internet llamado Oleada desde donde se accede a diversos contenidos. Airtel ha informado que su servicio se venderá con el nombre de Airtel Conecta y también dispondrá de numerosos servicios. Amena, más rezagada en esto del WAP, realizó algunas demostraciones en el pasado SIMO y se espera que antes de la primavera ya tenga su servicio en marcha.
Con estos precios no se puede decir que los operadoras estén apostando muy firme por este nuevo servicio, que a pesar del ruido que está causando en el mundo de las telecomunicaciones y en Internet, todavía está en sus primeros gateos -por lo menos en lo que a España se refiere-. Otra cosa es -como suele pasar casi siempre al hablar de tecnología punta- si miramos al extranjero. En Japón por ejemplo, NTT Docomo -que, por cierto, ha colaborado con Telefónica para poner a punto el sistema- es casi incapaz de atender la fuerte demanda que tiene su I-Mode, que cada semana recaba 80.000 nuevos adeptos. La base de esta tecnología es muy similar al WAP, pero ha sabido adaptarse a los gustos nipones a la perfección. Para hacerse una idea de lo que estamos hablando basta decir que disponer de conexión a Internet para conocer las noticias de los diferentes sectores que se ofrecen, disponer de e-mail, un banco de memoria para 500 nombres y 50 mails cuesta unas módicas 150 pesetas al mes. En los últimos seis meses, este servicio ha conseguido captar la atención de nada menos que 3 millones de usuario. ¿Por qué? Primero por el precio, pero también por prestaciones como copiar en el teléfono las canciones de karaoke...